Nostalgias de un emigrante-Niños de alpargatas y mocos-Antonio Miguel Oliveros Quiroga

NIÑOS DE ALPARGATAS Y MOCOS

¿Hay algo más importante que los niños?…

La vida de un niño es lo más importante, de cuantas preocupaciones puedan tener los adultos, no se deben poner barreras que impidan su felicidad y educación. Para muchos niños ahora es más fácil y su futuro se puede garantizar, aunque los comedores sociales cada día están más llenos comen un plato caliente y al llagar la noche solo tienen un trozo de pan y un vaso de leche. (Antes no era así). La tristeza de un niño en sus ojos sin saber cómo consolarle es desolador. ¿Hay algo más bonito que la felicidad de un niño reflejada en su cara? ¿Hay algo que merezca más nuestros esfuerzos y preocupación? Su alegría es nuestra propia alegría y a su vida todos tenemos que darles todo el cariño y facilidad, para que tengan una educación y formación, son los padres y educadores quienes están obligados para que se formen como personas. Hoy podemos alegrarnos y sentir que la vida vale la pena… cuando vemos a los niños jugando y riendo, reflejando en sus caras la alegría y viendo que por ellos tiene sentido dar cuanto tenemos. Verlos cómo crecen, juegan y hacen travesuras… cuando pasan del llanto a la risa, del enfado a dar un abrazo, cuando los levantamos al caerse y les hacemos una acaricia te lo agradecen con una sonrisa, es el mayor de los premios que podemos obtener de ellos. Los niños son lo más importante y no nuestros problemas, porque todo se puede remediar, sin que ellos sufran de las consecuencias. Es triste dejar que otras personas tengan que ocuparse de ellos… No tenemos que hacer de los niños un escudo para justificar nuestros errores o ponerlos como excusa, ellos se merecen cariño y una vida ajena a los problemas que les haga entristecer. Él había nacido en una mala época en una familia muy humilde, en un pequeño pueblo donde pocos eran de “buena cuna” (en su caso ni la tuvo) y ganarse la vida diaria era la lucha que tenían cada día.

Con unas malas condiciones alimenticias y pésimas higiénicas, los niños pequeños eran los peores parados en una época de dificultades, él tuvo la niñez más débil que se puede uno imaginar.